¿Te imaginas cosechar tus propias hierbas, verduras o flores en casa, aunque vivas en un departamento? Los huertos urbanos son la forma perfecta de reconectar con la naturaleza, comer más saludable y darle vida a tu espacio, sin necesidad de tener un gran jardín.
Además, ¡es más fácil de lo que parece! Aquí te contamos cómo empezar paso a paso:
1. Elige el lugar adecuado
No necesitas mucho espacio, pero sí buena luz natural, puede ser un balcón, una ventana soleada o incluso una pared. Lo importante es que tus plantas reciban al menos 4 a 6 horas de sol al día.
Tip: Si tienes poco espacio, piensa en huertos verticales o macetas colgantes.
2. Escoge bien tus recipientes
Puedes usar desde maceteros y jardineras hasta botellas recicladas o cajones de fruta. Lo esencial es que tengan drenaje (agujeros en la base) y suficiente profundidad para el tipo de planta que vas a cultivar.
3. ¿Qué plantar? Empieza con lo fácil
Si estás comenzando, lo mejor es elegir plantas nobles y agradecidas, como:
- Hierbas aromáticas: albahaca, menta, orégano, perejil
- Vegetales pequeños: lechuga, espinaca, rabanitos
- Tomates cherry o ajíes
Estas crecen rápido, necesitan poco cuidado y te motivan al ver resultados pronto.
4. Cuida la tierra y el riego
Usa tierra fértil o sustrato especial para huerto. Puedes agregar compost si quieres hacerlo más ecológico. El riego debe ser constante, pero sin encharcar. Un truco simple: toca la tierra, si está seca al tacto, ¡riega!
5. Sé paciente (y disfruta el proceso)
Un huerto es más que plantas: es un espacio de calma, aprendizaje y conexión. No te frustres si algo no crece a la primera. Observar, probar y ajustar es parte del camino. Además, puedes involucrar a toda la familia y convertirlo en una actividad compartida.
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Cuidar un huerto no solo embellece tu hogar, también alimenta tu bienestar.
